La
subcultura Teddy Boy se inició en Londres en la década de los 50 y
se extendió rápidamente por todo Reino Unido. Nacieron en la
época en la que todo tenía que ver con América. Estaban muy
vinculados al Rock and Roll y a la violencia, lo que sorprendió a la
recatada cultura británica. Fueron originalmente conocidos como Cosh
Boys, y el nombre Teddy Boys se lo dio el periódico Daily Express al
referirse a ellos con la abreviatura del nombre Edward, en 1953.
Esta
subcultura tiene como característica que sus miembros eran hombres
jóvenes y ricos, especialmente oficiales de la guardia, cuyas
vestimentas estaban inspiradas en el estilo dandy de la época
eduardiana, de ahí el nombre. En ese momento, esa era distaba poco
más de 40 años, y sus abuelos y algunos padres llevaron el mismo
estilo por primera vez. La tendencia surgió como aumento de los
ingresos después de la guerra.
Los
Teddy Boys fueron los primeros en hacer aceptable el llevar ropa que
no fuera para trabajar, ir a la escuela o a misa los domingos; sino
que crearon un estilo definido.
La
película americana Semilla de maldad marcó un hito en el Reino
Unido. Cuando, en 1956, se proyectó en el Elephant and Castle, al
sur de Londres, la audiencia adolescente de Teddy Boys provocó
disturbios, rompiendo los asientos y bailando en los pasillos del
cine. Después de eso, los disturbios se reprodujeron en todo el país
allá donde la película se proyectó.
Algunos
Teds formaron pandillas y ganaron notoriedad tras los violentos
enfrentamientos con bandas rivales, que eran exagerados con
frecuencia por la prensa popular. En Notting Hill un gran número de
Teddy Boys estuvieron implicados en ataques contra la comunidad de
las Indias Occidentales.
Este
estilo de vida violento fue exagerado de forma sensacionalista en la
novela “Teddy boys” por Ernest Ryman publicada, por primera vez,
en Inglaterra en 1958.
La
ropa usada por los Teddy Boys incluye chaquetas de paño,
generalmente en tonos oscuros, a veces con cuello de terciopelo;
bolsillos con solapas; pantalón con cintura alta, a menudo
exponiendo los calcetines. El conjunto también incluía una camisa
de cuello alto sin solapas, conocido como “cuello de Mr. B.”, ya
que fue usado a menudo por el músico de jazz Billy Eckstine; un
estrecho lazo "Slim Jim" o una corbata "Maverick"
del oeste americano; y un chaleco brocado. Las ropas eran, en su
mayoría, hechas a medida a un alto precio, y pagados por medio de
cuotas semanales. El calzado favorito incluía Oxfords bien pulidos;
o zapatos con suela ancha, a menudo de ante, conocidos como brothel
creepers. Los peinados preferidos eran el cabello largo muy moldeado
y engrasado, con un flequillo pronunciado y los lados peinados hacia
atrás en forma de "culo de pato". Otro estilo era el
"Boston", en el que el cabello engrasado se peinaba hacia
atrás y era cortado en cuadrado por la nuca.
La
característica chaqueta de paño no era tan poco práctica como
parecía. No solo actuaba como símbolo distintivo sino que estaba
hecha de lana y tenía un montón de bolsillos. Esto mantenía a sus
dueños calientes mientras deambulaban por las calles y era también
una buena manera de esconder armas y alcohol, algunos llegando a
meter cuchillas, cadenas de bicicletas o navajas debajo de sus
elegantes ropas.
Las
chicas, por supuesto, no se quedaban atrás. Teddy Girls o Judies
usaban chaquetas de paño, faldas lápiz y la ropa de los hombres. Su
estilo evolucionó más tarde incorporando la influencia americana de
las faldas de vuelo, las colas de caballo o los pantalones de
toreador. Típicas descendientes de la clase trabajadora, las Teddy
Girls eran trabajadoras en las fábricas que pasaban el tiempo
haciendo su propia ropa y rechazando las convenciones propias de su
época.
La
peculiar filosofía de los Teddy Boys no murió en la Inglaterra de
los años 50 y 60 sino que fue esparciéndose por el mundo y
consiguiendo fieles seguidores con el paso del tiempo. A lo largo del
tiempo fueron produciéndose revivals del movimiento Ted.
Estos
revivals ganaban en colorido a medida que se acercaban los años 80.
Fue en estos años cuando surgieron bandas que, como un homenaje al
primer rock n’ roll de los años 50, pudieron otra vez de moda la
estética de las americanas bicolor y las camisas con pajaritas.
Los
Teddy Boys inspiraron en décadas posteriores a diferentes grupos
ingleses: los rockers en los años 60 que convirtieron el rock en el
vehículo de una rebelión indiscriminada contra todo, llámese
familia, escuela, trabajo, policía o extranjeros; y los rockabilly
en los 70.
De
ellos también surgen los llamados Mods, que vestían trajes
italianos, pantalones estrechos, cabello corto y su característica
principal era que se conducían en motocicletas Vespa.
Actualmente
la influencia del sigilo Teddy Boy sigue estando presente, en la
cultura popular, especialmente entre artistas de la música pop, el
R&B, el garage-rock y el electro pop. Un ejemplo de ello son
divas como Rihanna o Janell Monae que han optado por modernizar
estilos de peinados típicos de este look.
Los
Teddy Boys quienes han sido un referente para los jóvenes de 60, 70
y 80, también ha llamado la atención de los diseñadores
contemporáneos y lo podemos ver en cómo nos vestimos hoy, así como
en las colecciones desarrolladas en los últimos años por Prada,
Dior, Bottega Veneta, Jil Sander y en varias editoriales.
Hace un par de años Vogue publicó un editorial sobre cómo ser una Teddy girl, basado en el cambio de look de Alex Turner de desaliñado a rockabilly. Estas son algunas de las fotografías.