martes, 28 de mayo de 2013

HOW TO BE THE PERFECT TEDDY GIRL



La subcultura Teddy Boy se inició en Londres en la década de los 50 y se extendió rápidamente por todo Reino Unido. Nacieron en la época en la que todo tenía que ver con América. Estaban muy vinculados al Rock and Roll y a la violencia, lo que sorprendió a la recatada cultura británica. Fueron originalmente conocidos como Cosh Boys, y el nombre Teddy Boys se lo dio el periódico Daily Express al referirse a ellos con la abreviatura del nombre Edward, en 1953.

Esta subcultura tiene como característica que sus miembros eran hombres jóvenes y ricos, especialmente oficiales de la guardia, cuyas vestimentas estaban inspiradas en el estilo dandy de la época eduardiana, de ahí el nombre. En ese momento, esa era distaba poco más de 40 años, y sus abuelos y algunos padres llevaron el mismo estilo por primera vez. La tendencia surgió como aumento de los ingresos después de la guerra.
Los Teddy Boys fueron los primeros en hacer aceptable el llevar ropa que no fuera para trabajar, ir a la escuela o a misa los domingos; sino que crearon un estilo definido.

La película americana Semilla de maldad marcó un hito en el Reino Unido. Cuando, en 1956, se proyectó en el Elephant and Castle, al sur de Londres, la audiencia adolescente de Teddy Boys provocó disturbios, rompiendo los asientos y bailando en los pasillos del cine. Después de eso, los disturbios se reprodujeron en todo el país allá donde la película se proyectó.
Algunos Teds formaron pandillas y ganaron notoriedad tras los violentos enfrentamientos con bandas rivales, que eran exagerados con frecuencia por la prensa popular. En Notting Hill un gran número de Teddy Boys estuvieron implicados en ataques contra la comunidad de las Indias Occidentales.

Este estilo de vida violento fue exagerado de forma sensacionalista en la novela “Teddy boys” por Ernest Ryman publicada, por primera vez, en Inglaterra en 1958.
La ropa usada por los Teddy Boys incluye chaquetas de paño, generalmente en tonos oscuros, a veces con cuello de terciopelo; bolsillos con solapas; pantalón con cintura alta, a menudo exponiendo los calcetines. El conjunto también incluía una camisa de cuello alto sin solapas, conocido como “cuello de Mr. B.”, ya que fue usado a menudo por el músico de jazz Billy Eckstine; un estrecho lazo "Slim Jim" o una corbata "Maverick" del oeste americano; y un chaleco brocado. Las ropas eran, en su mayoría, hechas a medida a un alto precio, y pagados por medio de cuotas semanales. El calzado favorito incluía Oxfords bien pulidos; o zapatos con suela ancha, a menudo de ante, conocidos como brothel creepers. Los peinados preferidos eran el cabello largo muy moldeado y engrasado, con un flequillo pronunciado y los lados peinados hacia atrás en forma de "culo de pato". Otro estilo era el "Boston", en el que el cabello engrasado se peinaba hacia atrás y era cortado en cuadrado por la nuca.

La característica chaqueta de paño no era tan poco práctica como parecía. No solo actuaba como símbolo distintivo sino que estaba hecha de lana y tenía un montón de bolsillos. Esto mantenía a sus dueños calientes mientras deambulaban por las calles y era también una buena manera de esconder armas y alcohol, algunos llegando a meter cuchillas, cadenas de bicicletas o navajas debajo de sus elegantes ropas.
Las chicas, por supuesto, no se quedaban atrás. Teddy Girls o Judies usaban chaquetas de paño, faldas lápiz y la ropa de los hombres. Su estilo evolucionó más tarde incorporando la influencia americana de las faldas de vuelo, las colas de caballo o los pantalones de toreador. Típicas descendientes de la clase trabajadora, las Teddy Girls eran trabajadoras en las fábricas que pasaban el tiempo haciendo su propia ropa y rechazando las convenciones propias de su época.


La peculiar filosofía de los Teddy Boys no murió en la Inglaterra de los años 50 y 60 sino que fue esparciéndose por el mundo y consiguiendo fieles seguidores con el paso del tiempo. A lo largo del tiempo fueron produciéndose revivals del movimiento Ted.
Estos revivals ganaban en colorido a medida que se acercaban los años 80. Fue en estos años cuando surgieron bandas que, como un homenaje al primer rock n’ roll de los años 50, pudieron otra vez de moda la estética de las americanas bicolor y las camisas con pajaritas.

Los Teddy Boys inspiraron en décadas posteriores a diferentes grupos ingleses: los rockers en los años 60 que convirtieron el rock en el vehículo de una rebelión indiscriminada contra todo, llámese familia, escuela, trabajo, policía o extranjeros; y los rockabilly en los 70.
De ellos también surgen los llamados Mods, que vestían trajes italianos, pantalones estrechos, cabello corto y su característica principal era que se conducían en motocicletas Vespa.

Actualmente la influencia del sigilo Teddy Boy sigue estando presente, en la cultura popular, especialmente entre artistas de la música pop, el R&B, el garage-rock y el electro pop. Un ejemplo de ello son divas como Rihanna o Janell Monae que han optado por modernizar estilos de peinados típicos de este look.
Los Teddy Boys quienes han sido un referente para los jóvenes de 60, 70 y 80, también ha llamado la atención de los diseñadores contemporáneos y lo podemos ver en cómo nos vestimos hoy, así como en las colecciones desarrolladas en los últimos años por Prada, Dior, Bottega Veneta, Jil Sander y en varias editoriales.

Hace un par de años Vogue publicó un editorial sobre cómo ser una Teddy girl, basado en el cambio de look de Alex Turner de desaliñado a rockabilly. Estas son algunas de las fotografías.










BLOGSPOT ME



Ya nadie pide messenger, email o número de casa. Conocemos a gente de la que ni siquiera sabemos su verdadero nombre de pila. Seguimos cada uno de los movimientos de su día a día. Hablo de los bloggers, por supuesto.


El mundo de los bloggers es demasiado amplio como para hacer una lista de los más influyentes, así que he decidido hablar de los bloggers de estilo personal.
El blog fashionista.com, que es una de las páginas webs de noticias sobre moda más importantes, efectuó una lista de los personal style bloggers más influyentes del 2013. Yo voy a hablar de algunos de ellos:
  1. Manrepeller:
    Con alrededor de 3,7 millones de visitas por mes, y más colaboraciones con marcas que ningún otro blogger, Leandra Medine, de 24 años, domina la red. Y con razón. Su blog se caracteriza por enseñar outfits que espantarían a un hombre, de ahí el nombre del blog. Hay incluso un test para ver en qué grado repeles a los hombres.
    Step into a pair of sneakers and you’re comfortable. Step into a pair of pumps, however, and you’re invincible.”


  2. Bryanboy:
    La gente se jacta de odiar a Bryan Boy, un filipino que llama a Nueva York, su hogar. Esto es probablemente porque están celosos de sus millones de seguidores en Twitter, su acuerdo con CAA y su éxito como jurado en America's Next Top Model. Su éxito no tiene precedentes: fue el primero en realmente vivir de su blog. Y se puede discutir que sigue siendo el mejor.

  3. Cupcakes and Cashmere:
    Un mix de comida, y sobretodo moda, el acercamiento de Emily Schuman de una manera amistosa y sincera, muy de LA, le ha hecho convertirse en una de los ídolos de las mujeres por todo el país. El año pasado Emily firmó un contrato con Estee Lauder. También publicó su primer libro en Agosto del 2012, aunque algunos fans dicen que se parece demasiado al contenido de su blog. Sin embargo éste, creado en 2008, sigue siendo una máquina de hacer dinero.

  4. Into the Gloss:
    La actual asistente de Vogue, Emily Weiss usó una muy buena táctica para presentar su blog hace dos años. No sólo contrató al mejor y más demandado diseñador digital, Michael Harper, sino que se las ha arreglado para crear imágenes que parecen mejor hechas y de mejor calidad incluso que las de Vogue.

  5. Ps. I Made This:
    Erika Domesek, la fundadora de la innovadora hazlo-tu-mismo marca, es una distinguida diseñadora viviendo en NY. Su objetivo es inspirar y animar a sus seguidores con el concepto de “I see it. I like it. I make it.” “Lo veo, lo quiero, lo hago”.



LEER ESTÁ DE MODA


Todo un adelanto que transformará el mundo está en marcha. Llegan los libros sin papel, sin pantalla, sin texto, sin gigas, sin lectores ni nada. Se trata de la última moda en el mundo de las tendencias: el bolso-libro personalizado, vacío de páginas pero mucho más caro que un libro lleno de vidas, mundos y sueños. 


De momento tiene poca tirada, sólo las estrellas de Hollywood lucen este tipo de complemento portátil. Pero ya se empiezan a ver las versiones low cost en Zara y sucedáneos. 



Un invento para los que seguramente no han leído un libro en su vida y se les nota en la “lengua”. Pero eso sí, irán a la última llevando el bolso dentro del libro. No al revés. En el bolso-libro no caben libros, sólo se llena con cosas que no son literatura sino diversos objetos tan inútiles o útiles como la vida misma.



La diseñadora francesa Olympia Le Tan fue la primera que  diseñó una colección de bolsos en forma de libros famosos. Son muy originales y divertidos aunque sus modelos no son asequibles a cualquier bolsillo ya que cuestan en torno a 1200€, pero buscando en internet podéis encontrarlos bastantes parecidos, en versión low cost. 


Son libros que tienen bolsillos y cremallera en vez de páginas y además tienen la opción de poner una cadena.

MARCAS VS PÚBLICO


Es muy interesante ver cómo la marca se ve a sí misma y lo que pretende transmitirnos y cómo la vemos nosotros según lo que de verdad nos transmite. Un ejemplo de esto es Louis Vuitton.

Cómo se ve Louis Vuitton.
La página web de la marca nos cuenta de forma breve sus orígenes. Nos habla de cómo, con tan sólo 16 años, Louis Vuitton tomó la decisión de convertirse en fabricante de baúles. La primera tienda se abrió en 1854. En 1886, su hijo Georges Vuitton revolucionó las cerraduras de equipaje con un ingenioso sistema que convirtió sus baúles de viaje en cofres del tesoro. También inventó el estampado Monogram, tan característico de la marca.
Se describe a sí misma como un mundo de elegancia, inspiración en innovación. Detrás del nombre legendario se esconde la trayectoria de un visionario que cambió el arte de hacer maletas, y con eso, la noción de viajar en sí misma.



Cómo vemos Louis Vuitton.
Leyendo una serie de comentarios en foros sobre la marca, me he encontrado con opiniones que me han llamado mucho la atención:
  • Llevan toda la vida haciendo lo mismo. No sé si eso es bueno o malo.” Sí es verdad que dan esa impresión, todo parece más de lo mismo: mismos colores, mismos estampados, mismos bolsos. Pero no es así. Puede que pensemos eso porque estamos acostumbrados a ver el clásico speedy con el estampado Monogram, pero lo cierto es que tienen miles de cosas diferentes, sólo hay que ver los desfiles y las nuevas colecciones.

  • El carácter obsesivo y la inocencia de su trabajo me emocionaron. Consigue compartir su visión del mundo con nosotros.” Yakoi Kusama sobre Marc Jacobs.

  • En la pirámide del negocio de la moda, con sus extremos polarizados entre el lujo y el producto low cost, Louis Vuitton intenta acortar distancias y carga el acento de su imaginario de marca sobre un producto más popular y accesible que el elitista modelo de bolso Alma al que el propio amuleto acompaña.” Este comentario se refiere a la serie de dos partes en la que Obtem te lleva a echar una mirada a una de las últimas iniciativas publicitarias de esta marca. Las ilustraciones y el tema musical confirman la elegancia y soberanía de la casa, a la vez que esparcen y desparraman la envoltura musical del relato hacia territorios baldíos para la firma, intentando llamar la atención de sectores más jóvenes que se alimentan en usos y sonidos alternativos muy ajenos al elitismo del lujo institucional. El anuncio ni siquiera muestra el bolso en sí mismo, sino un dibujo en el que apenas se aprecian los detalles.
  • Sólo apuntar un reto pendiente para Vuitton en este tipo de iniciativas: conseguir que el usuario de la red interactúe realmente con la marca.” A louis Vuitton sólo le falta acercarse un poco más a nosotros, ya que nos presenta una realidad demasiado idealizada y difícil de creer. Aun así, ¿quién dijo que es malo soñar?



EL COLOR EN EL CINE: “EXPIACIÓN, MÁS ALLÁ DE LA PASIÓN”


El color verde representa simpatía, armonía, crecimiento, exuberancia, fertilidad y frescura, aunque también egoísmo. El verde oscuro, tiene también una correspondencia social con el dinero. Puede que éstas fueran algunas de las razones por las que Joe Wright, director de la película, insistiera en que el color de este vestido tenía que ser verde, algo que nunca llegó a explicar.
El verde es el color natural por excelencia. De ahí, que sea el color adoptado por los ecologistas.
Y no nos olvidemos de su significado más conocido, la esperanza. Estos últimos días hemos llegado a oír que había que cambiar el color de la ropa interior de Nochevieja, del rojo al verde, para que las cosas nos vayan mejor.


En esta película, una adolescente de 13 años, Brioney cometió un terrible pecado: mintió por celos y arruinó la existencia de un amor entre su hermana Cecilia y el hijo del jardinero, Robbie. Lo acusa de violación una noche. La rubia e intelectual adolescente -escribe novelas a esa edad, inspiradas en fantasías románticas sublimadas por sentimientos que la diferencia de clases le ordenan esconder- comete un delito moral. Robbie debe elegir entre la cárcel o ir a la guerra. Cecilia se suma a un cuerpo de enfermeras, sin saber que su culpable hermana la imitará. Ésta es la historia que escribirá para reivindicarse transcurridos los años, pasadas las guerras europeas, muertos los seres queridos, la celosa niña convertida en escritora de veinte exitosas novelas inglesas. "Ésta es la número 21", presenta en un programa televisivo. "Pero es la primera". En ella relata su grave acusación, la destrucción de un amor y su silencio que la imagen religiosa no disculpa aunque la haya observado cometerla detrás de los cristales del palacio. "¿Es autobiográfica?", pregunta el entrevistador a la madura escritora. "Sí. Están todos los nombres y datos reales. Pero deberá comprender el motivo de la tardanza en editarla. Necesitaba que los recuerdos, muchos recuerdos sean inventados, para permitir que los amantes concreten su amor y no mueran recordando un segundo de amor contra una biblioteca como avergonzados de su instinto purificad por el amor".

Joe Wright quería dejar patente la diferencia entre cada una de las tres partes de la película mediante la fotografía y una paleta de colores para cada periodo. Eso significaba que la coordinación entre el realizador, el director de fotografía, la diseñadora de producción, la diseñadora de vestuario y la maquilladora/estilista debía ser perfecta. El equipo trabajó primero con un historiador antes de que cada departamento preparara cuidadosamente cada periodo estudiando cuadros, fotografías, películas e investigando en archivos.
Sarah Greenwood explica la diferencia entre la decoración y los vestuarios de 1935: “La diferencia principal entre los trajes diseñados por Jacqueline y la decoración es que los colores que escogió eran más vibrantes que los nuestros. Rebajamos mucho los colores en la decoración para que hubiera un contraste evidente, no sólo entonces, sino también en el periodo de Londres y de Dunkerque”.
Joe Wright y el director de fotografía Seamus McGarvey no sólo usan la cámara para capturar las imágenes de la historia, sino como un instrumento narrativo en sí, mediante movimientos y diferentes técnicas fílmicas. El aspecto completamente distinto de las escenas que transcurren en 1935 se debe en parte a la iluminación y a la técnica usada por Seamus McGarvey para darles un tono radiante. “Usamos un filtro muy especial – en realidad está hecho con medias Christian Dior – para crear una especie de halo en los reflejos, suavizarlos y dar una sensación realmente lustrosa. Pero según avanza la historia, todo se hace más sombrío, hay un lado oscuro que pugna por aparecer y que se hace más patente en otros periodos de la película”.

Además de los temas que se repetían en los decorados y en el vestuario, también estaba el aspecto de las tres actrices que interpretan a Briony Tallis, el personaje central. La diseñadora de vestuario Jacqueline Durran dice: “Era muy importante mantener la continuidad entre las tres. Como empezamos con Saoirse vestida de blanco marfil, y seguimos con el azul pálido y el blanco del uniforme de enfermera de Romola, era absolutamente esencial que Vanessa Redgrave siguiera en esos tonos”.
Jacqueline Durran  es una diseñadora británica. Ganó el premio BAFTA por la película “Vera Drake”. Se hizo conocida por su trabajo en “Orgullo y Prejuicio”, por el que recibió una nominación al oscar y ganó un Satellite Award.Fue nominada para el “Best Costume Design in the80th Academy Awards" por su trabajo en “Expiación”.
Un vestido concreto de la película es la clave de la trama.

Este vestido verde esmeralda de “Expiación” podría ser el vestido más famoso del vestuario en una película de la última década.
De hecho fue votado recientemente como 'Mejor Vestido de todos los tiempos” por Sky Movies y los lectores de In Style.
Este vestido largo, ceñido de noche es un logro extraordinario.
 La diseñadora de vestuario, Jacqueline Durran creó el vestido de la nada. Su intención era alejarse de lo recargado y pomposo, el estilo típicamente adoptado por las familias de clase media-alta durante esa época y crear algo de alta costura en su lugar.
El rico color verde esmeralda se pidió especialmente por el director Joe Wright.
 Fue una combinación de tonos: Lin negro, verde organza y gasa verde. Una elección inusual para el cine, ya que se cree que el verde incómoda a los espectadores. Supuestamente el verde alude a la tentación y al pecado, pero sus significados son múltiples y a menudo contradictorios. Yo personalmente considero que el color verde simboliza la envidia que tiene Briony por su hermana Cecilia, ya que está también secretamente enamorada de Robbie. Es incluso posible que el vestido ni siquiera tuviera ese color sino que es su propia memoria la que la traiciona.
En un nivel puramente estético del vestido, es ideal para enmarcar a la elegante Keira Knightley.
 La forma y la tela acentúan cada gramo de su feminidad.
Tanto la estrella para el pelo como la pulsera fueron diseñados por Chanel.
Me sorprendió descubrir que la falda y la blusa estaban separadas, llegando a utilizarse diez blusas y cuatro faldas, debido a lo finas que eran.
Este vestido es un enigma, el pináculo de la elegancia inalcanzable. Tiene el propósito de ser adorado y admirado, no está diseñado para poder usarse.



lunes, 27 de mayo de 2013

¿Qué me pongo hoy?

La mayoría de nosotros no llegamos a darnos cuenta la gran influencia que tiene la psicología sobre la moda. ¿Intentamos transmitir algo con nuestra vestimenta? Aquí os dejo una guía que parece explicar las connotaciones implícitas de cada una de nuestras prendas.



Negro, color de la autoridad y poder. Puede hacer que su portador aparezca distante y dominante. Por lo tanto, debe ser evitado en las entrevistas. (Aunque cabe señalar que es la prenda estrella en los armarios de las mujeres… ¡es adelgazante!)


Blanco, sinónimo de pureza, castidad y pulcritud. Usado por las novias para comunicar inocencia, y doctores y enfermeras para transmitir esterilidad. Imprescindible como básico.


Azul es igual a tranquilidad, autoridad, confianza y lealtad. Es el color que produce las mayores ventas en el mundo, reportando la tasa más alta de éxito en entrevistas y ventas. Es uno de los favoritos de las fuerzas de la ley y las milicias. El azul es el principal color transmisor de poder.


Marrón, comunica credibilidad y estabilidad. Es un excelente color para transmitir información, ya que crea un ambiente neutral para discusiones abiertas. Finalmente, cabe señalar que el marrón es un color mucho más buscado por los hombres que por las mujeres.


Tonos beige, son colores de tierra relajantes, reductores del estrés, que invitan a la comunicación. Muchas veces percibidos como poco enérgicos y pasivos, éstos son los colores para usar para reconfortar a otros o para transmitir información.


Gris, simboliza neutralidad y sofisticación. Después del azul, es el segundo color más popular a la hora de las entrevistas. Si quieres lucir autoridad de un modo menos opresivo que con el negro, opta por el gris. Es una excelente elección.


Rojo, denota calor, peligro, poder, pasión y fortaleza. El rojo es el color más intenso en lo emocional, y estimula a una respiración y ritmo cardíaco más rápidos. Cuando se lo usa como color secundario, puede motivar a las personas a tomar decisiones rápidas y a incrementar las expectativas. Sin embargo, puede realzar las emociones durante negociaciones y confrontaciones, por lo que será inteligente evitarlo en grandes cantidades cuando enfrentes estas situaciones.


Naranja, como el rojo, estimula las emociones fuertes. Asociado con la calidez y la cosecha de otoño, las personas que usan anaranjado son percibidas como de fuerte personalidad. El anaranjado brillante, al igual que el rojo brillante, atraerá la atención y evocará las emociones intensas, así que puedes usarlo en poca cantidad en entrevistas laborales, negociaciones, y cuando estés esperando una confrontación.


Amarillo, inspira un amplio rango de emociones, desde alegría y esperanza hasta precaución, decadencia y celos. Asimismo, realza la concentración, y es por eso que se las usa en las libretas legales. No obstante, las personas pierden sus estribos más a menudo en habitaciones amarillas que en espacios de otros colores, y los bebes llorarán más en ambientes pintados de amarillo. Éste es el color más difícil de asimilar para el ojo, por lo que puede saturar si es usado de más.


Verde, significa naturaleza, éxito, salud y seguridad. Es un color relajante y refrescante. El verde es el color más fácil para el ojo y, actualmente, es uno de los más populares en las decoraciones. Las personas que esperan para hacer su entrada en sets de televisión, son sentadas en habitaciones verdes con el objetivo de relajarlas. El verde oscuro es masculino, conservador e implica salud.


Púrpura, simboliza lealtad, riqueza, poder y sensibilidad. Es además el color de la pasión y el amor. El púrpura estimula la imaginación, pero como a menudo se lo ve como un color femenino.


Rosa, puede inspirar gran variedad de emociones, desde diversión y excitación (rosas fuertes) hasta relajación y falta de energía (rosas pálidos). El rosado es visto como un color femenino, y, al igual que el púrpura, debe ser usado con discreción en ocasiones de negocios. En los deportes masculinos profesionales, los vestuarios visitantes, con frecuencia, son pintados de rosa para reducir la energía y amedrentar.




Ahora, a la hora de ir a formularte la temida pregunta de cada mañana ¿Qué me pongo hoy?”, bastará con que reflexiones sobre que sentimientos quieres transmitir. ¡Tarea fácil! (o eso parece…)